<!DOCTYPE html> Tal parece que Nova continúa sin cambios significativos tras Secret Wars. Debo reconocer que no leí el volumen anterior completo, solo los primeros números, por lo que conozco solo lo más básico de la historia de Sam Alexander. Más allá de mi amor infinito por Richard Rider y lo doloroso que fue el verlo reemplazado en la editorial, entiendo que esta es una serie que apunta al público más infantil, y su considerable éxito en la televisión junto a Spider-Man lo atestigua, por lo que seré justo al momento de evaluar sus aventuras. Dicho esto, este primer número me resulta bastante mediocre, la verdad. Sean Ryan es el nuevo guionista, un joven editor convertido en escritor, y creo que Gerry Duggan había hecho un mejor trabajo en el volumen anterior. El cómic en sí no tiene grandes problemas que resulten obvios — salvo tal vez los diálogos de los pequeñuelos, que no me resultaron muy auténticos — pero sí falla en generar un verdadero interés a través del número mismo. Lo único interesante ocurre en tres páginas, todas centradas en el padre de Sam y que construyen un “misterio” sumamente obvio en su naturaleza. El arte de Cory Smith sufre del mismo problema que Ryan. No tiene ningún problema evidente, con algunas viñetas bastante buenas, pero tampoco logra destacar. También me molestó un tanto el trabajo de David Curiel, coloreando a Sam de un amarillo que le da un aspecto un tanto enfermizo. Eso sí, debo elogiar la buena labor de Smith al momento de retratar a los niños, quienes realmente parecen niños, incluso cuando Sam está con su traje. Muchas veces ocurre que al ponerse su atuendo de superhéroe adoptan un cuerpo casi de adulto joven, perdiéndose su edad por culpa de la limitada habilidad del artista al momento de retratar al personaje según su edad. Veremos qué pasa en el segundo número… y trataré de ponerme al día con el volumen anterior, para no perderme potenciales detalles importantes. Compromiso de reseñador (?). Aprovechando esta oleada de lanzamientos, Marvel no pierde la oportunidad de darle su propia serie a otro de sus nuevos personajes populares: Drax. Co-protagonista del bombazo en taquilla que significó la película Guardians of the Galaxy, resulta bastante obvio su llegada, y de hecho sorprende que se hayan demorado tanto. El primer número tiene un humor agradable, casual, con diálogos interesantes, situaciones relativamente divertidas de leer… Pero no me engancha. No del todo, al menos. Scott Hepburn le otorga a Drax una expresividad muy buena, visualmente divertida… pero ¿es Drax? ¿Debería un personaje como él ser así? Usualmente Drax es un tipo serio, de carácter duro… pero aquí, a pesar de no caer en una actitud cómica, sí se ve más enojón y explosivo. Recuerdo un antiguo número de Silver Surfer guionizado por Jim Starlin — previo a The Infinity Gauntlet — donde el Surfer debía deshacerse de Drax, ya que este lo seguía a todas partes para que lo llevara ante Thanos. A través de las curiosas situaciones, el timing de cada viñeta e inteligentes diálogos recibíamos un número sumamente divertido y disfrutable. Otro ejemplo más reciente es la miniserie de Drax previa a Annihilation guionizada por Keith Giffen, un veterano del humor en viñetas; aquí Drax conocía a Cammi, una chica que haría explotar cualquier detector de sarcasmo, y aunque el arte era sumamente oscuro y “serio”, era a través de los ácidos diálogos de Giffen que el humor llegaba al lector. No con muecas, sino que con los diálogos. Me imagino que CM Punk da la idea general de lo que debe ocurrir y sugiere algunos chistes aquí y allá, mientras Cullen Bunn hace el trabajo fino con los diálogos y la planificación de cada escena. Lamentablemente, creo que fallan en crear una historia, diálogos y un estilo de cómic que le venga a Drax. No digo que no pueda ser una serie con humor, sino que el estilo de humor al que apuntan no es el adecuado. Ese es mi principal problema con este cómic. Aún es pronto para juzgarlo como se debe, pero aunque aprecio el esfuerzo de Hepburn, reconozco su valía y creo que hace un gran trabajo, es el guion el que no está a la altura y hace que su esfuerzo sea un tanto en vano. Su estilo se siente como un cómic de Rocket Raccoon y Groot, no como un cómic de Drax. Espero que el segundo número me guste más, al menos tendremos a Terrax como personaje “invitado”, será entretenido ver eso. Por cierto, qué logotipo más feo.MicroReseñas Marvel 040
MicroReseñas Marvel 040
Nova #001
Drax #001