Mientras Peter Stanchek sigue movilizándose para evitar ser atrapado, G.A.T.E. desplaza un contingente para capturarlo y evitar que siga activando psiots a diestra y siniestra. Mientras, Livewire continúa con sus planes para frenar las operaciones de la organización conocida como Omen, encargada de “lidiar con el problema psiot”, a la vez que los distintos activados de Stanchek se refugian en un punto supuestamente seguro.
Número —mayormente— mudo, preludio a “The Seven Blades of Master Darque”.
En la entrega anterior aprendimos sobre el primer —y pequeño— Rai, creado por Father para lidiar con las inquietudes que surgían en New Japan. En este número damos un salto a alrededor del año 3.550, tras varias generaciones de Rais adaptándose a las necesidades que el contexto sociopolítico que se alza en la ciudad satélite dicta.
El choque de titanes continúa en Divinity II #003, con Adam y Myshka debatiendo sobre los límites de sus poderes y las implicaciones de éstos en la realidad del tiempo-espacio, mientras llevan un pulso —o un gallito, como le decimos en Chile— interdimensional. A pesar de lo denso y aburrido que pueda sonar eso, en realidad es un relato dinámico, con un vaivén entre ambos personajes que mantiene el interés del lector en cada página.
Tras varios meses de haber terminado el segundo arco, Rai regresa por fin. Retomamos la historia tiempo después desde la última vez, con algunos cambios importantes: Father ahora habita el cuerpo de Rai-XI e imparte justicia con sus propias manos; Lula y Grace siguen visitando a la Geomancer rescatada, a quien bautizan como Karana; Spylocke es mantenido en cautiverio y torturado por Father; Izak y Mono permanecen ocultos en las alcantarillas abandonadas; y Rai se encuentra en la superficie de la Tierra, separado de su fuente de poder en New Japan.
Tras difíciles pruebas, Ninjak ha logrado infiltrarse en Weaponeer, una organización criminal que fabrica armas con tecnología de punta para el mejor postor en el mercado negro. Todo este trabajo parece venirse abajo cuando es expuesto por Roku, la asesina y mano derecha de Kannon, cabecilla de Weaponeer. ¿Podrá escapar de una situación donde parece acorralado?